viernes, 11 de septiembre de 2020

En defensa de la virtud...




 LOS CRUZADOS DE CRISTO.

En nuestro Liceo San José, fuimos seleccionados para integrar el grupo de fervorosos trabajadores del Señor; pertenecimos a los "Cruzados de Cristo" y estábamos convencidos a defender nuestra fe en todo momento. Una institución con muchas cosas hermosas, muchos colores, alegría y  con los diferentes títulos entre los jóvenes tal como capitán, tropa y soldados .

Cierta vez como vigilantes de las buenas costumbres nos enteramos que en el frontis del teatro municipal se mostraba un afiche con  la imagen de una mujer vista por detrás y desnuda. Claro nosotros consideramos que era una imagen desagradable que ofendía el pudor. Allí nos concertamos para ir a sacar ese afiche tan ordinario y pecaminoso. Salimos  del colegio en la tarde y cada soldado (cruzado) ordenadamente al pasar íban rompiendo el afiche hasta terminar destruyéndolo todo. La película mexicana se llamaba "LA VIRTUD DESNUDA" y estaba protagonizada por SILVIA PINAL. Pensamos que nadie había descubierto los culpables pero no faltó uno de los cruzados que le contó a Elías Grayde, y este de inmediato fue acusarnos al "productor Ponchito Órdenes" quien ni corto ni peresozo, fue al colegio a reclamar por el daño de los afiches. De improviso nos llamaron a la Dirección y  el Padre nos interroga muy molesto teniendo al enojado Sr. Órdenes sonriendo. Dijimos la verdad, "cuando llegamos estaba roto y no vimos a nadie cerca". El cura disimuladamente sonrió y nos hizo dedo arriba diciendo en silencio ¡Bien chicos! y en voz alta: "para otra vez tengan cuidado con la propaganda del cine. Hay que cuidar los bienes ajenos". Ahora regresen a su sala.
Defendimos la fe y muy asustados nos secamos la transpiración con un "Fuiiii de la que nos salvamos por defender la verdadera virtud". "¡Cómo nos va cambiando la vida después!"



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