Pablo Neruda en una noche invernal. Es más que poesía, es teatro, actuación, arte, memoria, humor, amor, sorpresas y....
nuestro
lema habitual era aunque no lo crean...."los estudios están primero", a
luchar y aprender siempre. Bueno, lo intentamos no sólo sino que una y
otra vez. Pero hicimos todo lo posible por ganar, triunfar y aprovechar
el tiempo. Había que hacer lo que corresponda y algo más.
Como
nos encontrábamos a compartir, en la noche de lluvia nos juntábamos en la
cocina de casa de "Torombolo"- tomábamos te y conversábamos de todo,
soñando el futuro, el amor, la vida, las chiquillas de aquellos años
uuufff!. estaban muy lejos.
Recuerdo
que aquella noche la lluvia era contínua y la cocina tenía varios
tiestos por las molestas goteras-era un contínuo repitequeo.
Allí,
sin previo aviso, vivimos una preciosa improvisación de nuestro Premio
Nobel: El Pablo Neruda Criollo (como si otra vez lo vuelvo a mirar!)
Con
su abrigo cafe que se llamaba igual al dueño, comienza a caminar por el
"escenario de la cocina mientras suavemente musita al público con
emoción; "Puedo escribir....... (pausa-dolorosamente)
los versos más tristes... (con voz trémula y entrecortada, sí...es la pura emoción)
esta noche,
escribir por ejemplo.......(en sus manos vemos con horror el cuchillo cocinero de don Ruberto que mueve agresivamente)
la noche está estrellaaaaadddddddaaaaaaa!
y titilan..... el arma se entierra en el vate y tastabillea tropezando los cacharros de agua y cae violentamente....
se escucha con estruendo.....¡JAIME!
¡hasta cuando metes boche, déjanos dormir impercútico, hasta cuando!
y nosotros riendo estruendosamente ante el artista vencido que comienza a pararse mojado y humillado ente su tremenda actuación...tiene un gesto de amor y desazón en sus ojos inquietos.....
Ohhhhh.......¡¡que grande eres Neftalí Jaime!!
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