viernes, 1 de mayo de 2020

¡ y tú....qué estás haciendo por el Señor hoy día?


¿Qué estamos haciendo todos por Cursillo?
Lo fundamental para nosotros los cursillistas, es precisamente conquistar almas


Por: Antonio Gucek | Fuente: MCC Los Teques




Señor, solo a ti puedo dirigirme desde el fondo de mi corazón y pedirte perdón por mis fallas.

No puedo hablar de los demás, porque solo Tú puedes juzgar cada una de las circunstancias en las que todas y todos actuamos en esos ambientes donde nos pusiste.

Pero definitivamente SI SE UNA COSA…NO LO ESTAMOS HACIENDO BIEN.

No te prestamos nuestra boca para hablar, nuestros ojos para ver, nuestras manos para trabajar y nuestros oídos para oír.

¿QUÉ HACER, SEÑOR?, ¿Dónde ESTA NUESTRA FALLA?

Lo fundamental para nosotros los cursillistas, es precisamente conquistar almas para que mediante un cursillo de cristiandad TE CONOZCAN Y TE AMEN, COMO NOSOTROS TE AMAMOS...

...TE AMAMOS SEÑOR, no lo dudes... Pero nos olvidamos primero de hablarte a Ti de los hombres antes de hablarle a los hombres de Ti, de tu infinito amor, para que ellos también asuman su rol de Ser Iglesia.

¿Dónde quedó ese Ideal Plenario?, ¿Dónde está la Vida en Gracia, y ese trabajo en Iglesia?, ¿Acaso se nos perdió ese Piedad consciente, para pedir y elevar nuestras oraciones, a fin de obtener las luces del Espíritu Santo. Esa Piedad creciente, que nos debería impulsar a buscar mas personas, a fin de que si bien la cosecha es mucha…..los jornaleros seamos más, para precisamente vivir y compartir esa piedad y esas oraciones formando parte de tu Cuerpo Místico?

Ser Iglesia, formarnos en el conocimiento de tu fe, con las maravillosas herramientas que Tú nos has dado, y que comienzan desde la observación de cualquier cosa, por mas insignificante que esta sea, ya que es obra, maravilla y creación tuya. ¿Le hacemos notar eso a los demás? ¿Les sembramos hambre de conocerte leyendo las Sagradas Escrituras?

¿Ante tantas fallas, Señor, podemos decir que vivimos y gozamos de tus Sacramentos a tope; o solo somos unos convidados de piedra que consumen y consumen de todas tus maravillas, sin dar nada a cambio?

¿Cuál será mi actitud ahora, Señor?

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