Seguimos con nuestra reunión de grupo de amigos. Alguien me contaba que tenía pocos amigos, sólo conocidos. Claro, no es lo mismo; un amigo hay que trabajarlo, aceptarlo, conocerlo, ambos adelantan en construir una amistad férrea, más amigos y más cristianos.
También preguntaban en nuestro encuentro anterior ¿quién es el jefe?- la respuesta todos la sabíamos, no hay un jefe, algunos-generalmente el dueño de casa modera pero en la otra reunión será otro quien ayude a desarrollar la revisión de la hoja de servicios para que sea fluída, ordenada, mejor y más aprovechable.
Siempre será la posibilidad de ir mejorando. Poco a poco-como lo contábamos, una coma más, un esfuerzo más , pero un siempre "podría ser mejor"; una oración más auténtica, mejor, sencilla pero confiada, un estudio más abierto: como en la naturaleza, la nieve, el frío, la lluvia, una acción sacando provecho del teléfono: contactando, invitando, llevando la Buena Nueva, iluminando los oscuros dias de estos tiempos, viviendo la ultreya del movimiento, la escuela de formación y los temas del Mcc Nacional y mucho más. Cuando uno ya se imagina que estoy igual y tranquilo es cuando debemos preocuparnos porque algo hay que revisar, mejorar, trabajar siempre.
Esperamos que los nuevos grupos que comienzan por la Gracia de Dios,ya tengan su nombre, sus ganas de continuar en este crecimiento progresivo y descubran la necesidad de compartir y crecer.
Recuerden las frases anunciadas en nuestro encuentro: "los amigos son para siempre", "los hechamos mucho de menos desde la última reunión", "es posible seguirte Señor en la mañana, en el trabajo, en mi casa, y varias que compartimos en grupo: amistad y perseverancia.
Sigamos juntos y ...."de colores"
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