Hace muchos años que tengo una alegría que compartir con ustedes. Es este mismo día nueve, celebro el día de la Madres con alegría, emoción y muchos agradecimientos. Ella es una mujer generosa, entusiasta, alegre.
Me llamó ayer en la tarde: "trae por favor urgente la maleta que dejé preparada antes de ir al control con ginecólogo, te espero mañana y..."
-Pero, ¿es que nació nuestro bebé?
-No, no te preocupes. Ven tranquilo y trae el encargo.
Así, de esta forma forma, voy un tanto preocupado con la maleta. Pienso, como volviendo atrás como esta mujer valiente viaja siempre a los controles mensuales desde cuando recibió el aviso de que llega "alguien muy esperado a la familia".
Lo comentaba con su cuñado ante la pregunta: Oye, ¿Qué será la guagüita que esperas?
-No sabemos todavía pero, me interesa que sea sanita, hermosa, inteligente y..
-Chis, buena, no quieres ¿nada más?
Y la hora está llegando y voy emocionado: es el primer hijo, hay muchas cosas nuevas que aún no entiendo y la veo tan entera, decidida, consciente. Se fue al control y debo acompañarla en este momento de su llegada.
Lo conversamos bastante. Incluso intentamos solicitar la oportunidad de asistir al parto. Pero son aún otros tiempos y la solicitud ha sido denegada. Habría sido-me digo- otra oportunidad más para reconocer la entrega total de alguien que será madre por vez primera, ahora, cumpliendo el sueño de dos enamorados después de dos años y tanto de matrimonio.
Voy llegando a la Clínica Central pero me reciben un grupo de las amigas de ella, mi esposa: están sus hermanas Aida, Dome, también la Paty Cata, Vicky Lira, Yoya Grayde; pero las veo muy nerviosas y efervescentes. Diría que están extrañamente agitadas. Parece que quieren decir algo, pero no pueden.
-Es que ¿pasó algo ya?
-No, gritan al unísono, entra a la habitación allí al frente, allí está tu esposa. (que mujeres tan raras, están mas nerviosas que yo, me digo).
Entro con el bulto y la veo en su cama blanca. Está bella y radiante, sonríe como el primer día, la noto feliz y ríe y ríe...
-Qué bueno que estás bien. ¿Te dieron, por fin, el día de nacimiento definitivo ya?
-Pero, mira...es una sorpresa...¡ya nació!
-Pero, pero.....me caen varias lágrimas pero no entiendo, está tan contenta y recién le miro el abdomen y curiosamente está plano...pero...
-No te podía contar ya que fue muy rápido todo. Cuando llegué habían varios esposos esperando a sus mujeres pero yo llegué, entré y nació de inmediato, simple y rápido. Escuché alguien que reclamaba:
"Esto no es justo, llevo dos días esperando y estamos en las mismas, llega esta señora recién y listo...no, no pude ser"
Así llegó nuestro hijo. No tenía nada de ropa. Lo dejaron en la incubadora hasta que el padre le llevara las primeras pilchas (qué desconsiderado).
Dios mío, de ello hoy se cumplen cincuenta y un años. ¡Cómo no tendremos ganas de agradecer al Todopoderoso por esta celebración?
Cómo no decir este día nueve de mayo:
Gracias corazón, cariño, ¡como pudiste hacer este trabajo tan perfecto, detallado, amoroso, esforzado y amado.
Gracias por eso y todo lo demás de todos estos años,
tu enamorado,
siempre.
Madre: la palabra más bella pronunciada por el ser humano (Khalil Gibran)
Las madres todo lo pueden y todo lo encuentran
Una madre nunca está sola en sus pensamientos. Una madre siempre piensa dos veces, una por sí misma y otra por su niño (Sophia Loren)
