miércoles, 1 de enero de 2020

-El vino nuestro de cada día...






La virtud de tener un botellón o una modesta cajita de vino…
Cuando tenemos la tremenda suerte de que en la oficina almorzábamos todos juntos, se producían más de una oportunidad de alguna celebración: el cumpleaños, unos años de trabajo significativos o la celebración de los 25 años, lo que daba pábulo para mejorar sustancialmente el menú y agregarle algo más para el obligado brindis. Situación que era necesario solicitar al Jefe Oficina, la respectiva venia para beber vino- dado que era una fiesta, y una celebración que no se hacía todos los días.
La respuesta venía con una extraña recomendación, lo que constituia una sugerencia : " conforme pero siempre y cuando fuera “una cajita de vino” ya que había que seguir laborando y podrían chamuscarse los bigotes si ello se prolongaba.
La condición se aceptaba ipso facto-sin comentarios y se disponía a compartir la mesa con un vasito por persona para el brindis.
Las conversaciones enriquecían siempre los platos y no faltaba algún comentario de lo alto que era el techo de la sala comedor que de antigua data mostraba un elevado cielo, o de los parrones del jardín que añosos  habría que cambiar, de cualquier otro imprevisto que desviara transitoriamente la vista de la mesa donde ocurría un hábil y alegre "trasvasije mágico" (y automático!). 
Antes de terminar el ágape, el jefe miraba sospechosamente la inusitada e inmensa algarabía que un simple comentario provocaba en los comensales: ante tamaña duda tomaba la cajita para revisarla adivinando que estaría prácticamente vacía….ocurriendo que por virtud estaba casi llena….
el milagro del compartir obraba en cada uno una señal inequívoca de alegría, milagro, con sentimientos de que siempre habría de brindar por una justa ocasión.

Recordamos la Edición del Chirimoyo Mayo 1989 al término de la Capacitación de Contabilidad que llevaran a cabo en la Oficina de Rengo. Muchas caras que ya se fueron a la "Oficina Celestial" por lo que guardamos miles de recuerdos; por esos años reíamos muchas veces compartiendo la diaria labor.
Buenos tiempos. Buenos recuerdos.









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