"Todo era frío sin vida y tenebroso, cuando de pronto se oyó la voz de Dios..."
éste era el hit de aquellos años cuando jóvenes soñábamos con la música y las letras de canciones.
En el colegio era el tema del momento y aunque lo diviso yá muy lejano en el tiempo debo recordar a mi gran amigo de muchos años y de mi juventud: ESTEBAN ZÚÑIGA ACEVEDO- con quien compartimos vida, esperanzas y millones de sueños, muchos de ellos quizás empezaron con esta sencilla canción del Padre Alejandro Mayol, que hemos rescatado en You tube de una presentación en la televisión argentina. Gracias por el recuerdo. Una perfecta semblanza para recordar esta serie de "Este disco es mío" que querrá recordar a muchos de los amigos que fueron parte de la historia de mi vida. Una manera de decir GRACIAS POR EL TESTIMONIO MUSICAL.
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